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En Juan 8 del 1 al 11 podemos
encontrar la historia de la mujer que fue sorprendida en adulterio. En juan
8:10-11 (NVI) dice: “10 Entonces Él se incorporó y le preguntó: —Mujer,
¿dónde están? ¿Ya nadie te condena? 11 —Nadie, Señor. —Tampoco yo te condeno. Ahora vete, y no vuelvas
a pecar”.
Muchas veces nosotros hemos
cometido pecados que nos hacen sentir mal y culpables, y luego le pedimos
perdón a Dios por haberlos cometido y nos empezamos a sentir mejor y muy
agradecidos con el Señor porque él no nos hace sentir más culpables.
Luego de un tiempo nos empezamos
a sentir culpables nuevamente, comenzamos a pensar que somos malas personas que no merecemos
el perdón de Dios, nos ponemos algo dramáticos, a pesar de que sabemos que Dios
no nos condena más. Nos sentimos mal porque volvemos a hacer o pensar cosas que
nos hacen pecar así como antes, y pareciera que esto ya fuera una costumbre
porque siempre se vuelve a los malos hábitos y se convierte en un círculo
vicioso. Muchas veces esto ocurre porque tenemos nuestras mentes tan desocupadas que
dejamos que el diablo venga y lance esos pensamientos a nuestras mentes, pensamientos
que nos hacen retroceder en vez de avanzar.
Como mencione anteriormente,
podemos ver el ejemplo de la mujer que fue sorprendida en adulterio, Jesús le
dice a esta mujer que nadie la condena, que ni Él la condena; y así es con
nosotros, una vez nosotros nos hallamos arrepentido de lo que hicimos, una vez
le pidamos perdón al Señor por nuestros pecados, Él ya no nos condena, el
olvida nuestro pasado y nos continua amando como siempre lo ha hecho. No debemos
sentirnos mal por lo que hicimos, y si caemos de nuevo, Dios nos vuelve a
levantar; pero recordemos que Dios no es un juguete, solo porque Dios perdona
todos nuestros errores, no significa que podamos seguir haciendo lo mismo. Jesús
perdonó a la mujer pero le dijo “vete y no peques más”.
Yo sé que es muy difícil dejar de
hacer cosas que no le agradan a Dios, cosas que ya estábamos acostumbrados a
hacer; así mismo a veces es difícil ignorar esa culpa que el diablo quiere que
sintamos para que pequemos, pero recuerda que si Dios es con nosotros, quien
contra nosotros, nada ni nadie tiene el derecho de hacerte sentir culpable,
nada ni nadie tiene el derecho de lanzar pensamientos malos a tu mente porque
Dios es el que da paz a nuestro corazón y a nuestra mente, tal y como dice en
Filipenses 4:7.
Así que sigamos adelante, sin
sentirnos mal por lo que hicimos en el pasado porque Dios no nos condena. Evitemos
pecar, y si pensamientos malos o de culpa vienen a tu mente, recuerda que la
paz de Dios Guarda nuestro corazón y nuestra mente. No te desanimes porque no estás
solo, Dios está contigo y Él pelea la
batalla por ti, Dios te ama y Él te hace más que vencedor.
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In John 8:1-11
(NIV) we can read the story of the woman that was found in the act of adultery.
It says in John 8:10-11: "10 Jesus straightened up and asked her, — Woman, where are they? Has no one
condemned you? 11 —No one, sir, she said. — Then neither do I condemn you, Jesus
declared. — Go now and leave your life of sin.
We all have
sinned in our lives, and that makes us feel bad and guilty; then we pray and
ask God to forgive our sins, and he does; suddenly we start to feel happy, in
peace, and thankful with God, because He doesn´t make us feel guilty
anymore.
Then we start to
feel guilty again, we start to think that we are bad, that we don´t deserve
God´s forgiveness, and we start to be dramatic even though God doesn´t condemn
us anymore. We start to feel bad because we begin to think or to do the same bad
things we used to do. Sometimes it seems like we are so used to be the way we
were before God forgave us, and it starts to feel like a vicious cycle. This,
most of the time, happens because our minds are empty, we are not even
thinking, or doing something productive with it.
In those
moments Satan takes the time to make us feel guilty, and that makes us sin
again with our bad thoughts, and it starts to feel like we are walking
backwards instead of forward.
Like I
mentioned before, we can see the example of this woman in John 8:1-11, Jesus
asks the woman if someone condemns her, she says 'no', and Jesus answers 'neither
do I condemn you'. That’s the same with us, once God forgives us, He doesn´t
condemn us anymore, He forgets our past, our sin, and he doesn´t remember them
anymore; even if we fall again God lifts us up. We have to remember that God is
not our toy, just because God forgives us every time we fail and sin, it
doesn´t mean that we can do the same thing all over again, and make the same
mistakes again and again.
Jesus didn´t
condemn the woman, He forgave her, but he clearly said: 'Go now and leave your
life of sin.'
I know
sometimes it’s very difficult to leave in the past the bad things we did, it´s
difficult to change our bad habits, and to stop feeling guilty; it´s hard to
ignore the guilt and that bad habit that Satan tries to remind us to make us
sin again, but we always have to remember that if GOD is for us, WHO CAN BE
AGAINST US? Anyone or anything has the right to make us feel guilty. NO
ONE has the right to put in our mind bad thoughts because God brings peace to
our heart and mind just like it is said in Philippians 4:7.
So keep moving
forward without feeling guilty of what you did in the past because God does not
condemn us. Let’s avoid sin, and if bad thoughts or thoughts of guilt come to
our mind, we don´t have to forget that the peace of god keeps our heart, and
our mind; don´t feel discouraged, because God has everything under control, God
is with you, and he fights the battle for you. God loves you, and he has made
you a conqueror.
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