Muchas
veces pensamos que porque somos cristianos y amamos o servimos a Dios nada malo
nos tiene que pasar. Y cuando cosas malas nos pasan comenzamos a dudar de Dios
y muchas veces hasta nos atrevemos a cuestionar su amor y su poder.
Creemos
que las cosas se le salieron de control o que no se da cuenta de todo lo que
estamos sufriendo.
Y
luego nos ponemos muchas veces a cuestionar la Biblia porque hay versículos en
los que leemos que nos dicen que los planes de Dios son de bien y no de mal y
creemos que entonces Dios está enojado con nosotros o algo por el estilo. Pero no es así. Los planes de Dios para
nuestra vida si son buenos, pero en ninguna parte de la biblia dice que no vamos a pasar por momentos difíciles.
¡MENTIRA!
A
Dios no se le pasa nada de nada, él sabe lo que estamos pasando y sabe que nos
duele, pero también sabe que somos fuertes.
Y te
entiendo. Se que en momentos de dolor y tristeza es difícil pensar en ser
fuerte o ser valiente y seguir adelante. O también solemos creer que por ser
cristianos debemos estar siempre sonrientes y positivos y hacer como si nada
malo nos pasa.
Pero
te tengo una noticia, bueno unas cuantas noticias y aquí va la primera…
Los
cristianos también pasamos por situaciones difíciles y de dolor. El seguir a Cristo
no nos exonera de problemas o de dolor. Ahora bien, La diferencia cuando
conocemos a Cristo es que ya no estamos solos, Dios está ahí con nosotros en
medio de la prueba y el dolor.
Con
Cristo podemos hallar paz en medio de la tribulación. En Juan 16: 33 dice que
en este mundo vamos a afrontar aflicciones, pero debemos descansar en él,
porque el ya ha vencido al mundo. Y así es como nos podemos dar cuenta que si,
vamos a pasar por momentos difíciles, en donde tal vez nos vayamos a sentir
solos. Pero en esos momentos es donde mas debemos recordar que Dios esta con
nosotros y él es quien nos da fuerza y nos ayuda a salir de la tribulación.
Y la
segunda noticia es… SE VALE LLORAR, se vale sentir y se vale porque somos
humanos, no robots.
El
llorar no te hace menos cristiano ni débil y tampoco significa que estemos
dudando. El llorar nos ayuda a liberarnos del dolor y nos ayuda a entender que
sin Dios no somos nada. Nos hace entender que lo necesitamos a él porque solos
no vamos a poder pasar por la prueba.
El es
quien nos hace descansar quien nos hace no sentir miedo en medio de la
oscuridad, porque él va con nosotros.
Y
entiendo que muchas veces sentimos que no vamos a salir de donde estamos y en
medio de eso se vale llorar, pero lo que si no se vale es darse por vencidos y
mucho menos dudar de Dios, de su amor y su bondad.
Llora, y llora todo lo que quieras, pero tampoco te des por vencido. Recuerda Dios
está de tu lado, el es quien pelea por ti la batalla y nunca te va a dejar. El
te ama y la prueba no significa que no te quiera. Aprovecha las pruebas para
aprender y deja que te formen en una mejor persona.
Animo,
no te desanimes. Se vale llorar, pero no rendirse.